septiembre 11, 2011

9/11: In Memoriam

Diez años se dice fácil, sin embargo, describir todo lo que ha sucedido en el mundo después de los deleznables, arteros y condenables hechos terroristas del «09.11.2001» en el complejo de edificios del WTC en New York, es una tarea que rebasa los alcances de esta entrada que tiene como fin dejar testimonio de un suceso que trajo una infinidad de cambios a nivel global, por ejemplo, la seguridad internacional, la seguridad interna, la guerra, el negocio de las armas, la soberanía, entre otros muchos rubros, incluyendo la forma de viajar en avión derivado de las nuevas políticas en materia de seguridad aérea.

Hoy todos los sitios de internet de noticias en el mundo, dedican una sección al 9/11 y The New Yor Times tiene una amplia cobertura que le llamó “The Reckoning: America and the World a Decade After 9/11” y ahí se pueden apreciar muchas interesantes secciones, una de ellas es: “Where Were You on Sept. 11, 2001?” y derivado de ésta última me vino a la memoria lo que justo hacía cuando estaban sucedido aquellos trágicos hechos… y precisamente me encontraba en clase de inglés en interlingua de la Zona Rosa. En ese momento desconocía lo que estaba pasando y fue al salir a las 9:00 horas que se sentía una sensación rara porque muchas personas estaban atentas a lo que decían en la radio, otras más estaban muy cerca de las televisiones de los restaurantes cercanos, poco a poco empezaba a conocer parte de lo que ocurría en los Estados Unidos, principalmente la atención se centraba en lo que pasaba en New York y así me fui caminando rumbo a mi entonces trabajo: el Tribunal Superior Agrario, que precisamente se ubica muy cerca de donde me encontraba. Al llegar a la oficina, los comentarios eran necesarios –y no eran para menos- mientras yo busqué una televisión para ver el tiempo real lo que seguía pasando. Ya para ese momento ambas torres se habían colapsado y en lo personal, fue algo que me dejó en extremo sorprendido y sin palabras, por lo que estaba pasando, por la magnitud de los hechos, por el número de personas que perdieron la vida y por la incertidumbre de las repercusiones que vendrían.

A manera de paréntesis, les comento que haber tenido la oportunidad de conocer las Torres Gemelas y estar en su mirador apenas un año antes de que dejaran de existir, fue una experiencia muy grata e inolvidable, porque he de confesar que tengo una altísima predilección por los skyscraper.

Bien, más allá de las diversas teorías que existen sobre los ataques terroristas de S-11, algo es cierto: miles de personas perdieron la vida y fue el punto de inicio de una nueva era en el mundo.

Sirvan estas breves palabras para dejar testimonio de parte de mis pensamientos sobre estos sucesos que nunca debemos olvidar y nunca debemos rendirnos ante la adversidad. Descansen en paz tod@s l@s acaecidos en los ataques terroristas del 9/11.

Pd: y tu, qué hacías y en dónde te encontrabas aquella fatídica mañana del 11 de septiembre de 2001?

SaLu2 y No Olvides Postear y Expresar Tu Opinión!!!

1 comentario:

REGINA dijo...

Es indiscutible el sufrimiento de las víctimas y familiares afectados por la destrucción de las torres gemelas,sin embargo, considero que es importante dejar claro que el principal responsable de todas estas muertes y de muchas, en varios países, sigue siendo el capitalismo voraz, al que no le importa traspasar límites, entre ellos la vida, la paz de las naciones,la autodeterminación de los pueblos, etc., con tal de conseguir grandes ganancias económicas, en este caso me refiero de manera directa a EE.UU., razón por la cual no creo en la versión oficial del ataque terrorista a las torres gemelas, más bien estoy consciente del terrorismo que EE.UU. ha implementado en cada uno de los países a donde su injerencia no es requerida. Duele ver a tantos niños mutilados y huérfanos, familias enteras destruidas, alteración de los hábitats naturales, etc. ESTE ES EL VERDADERO TERRORISMO QUE NO DEBEMOS OLVIDAR, aunado a las muertes de las personas que fallecieron en el derrumbe de las torres gemelas, quienes fueron víctimas no de los islamitas sino de la ambición desmedida.